Quizá nunca pensaste que tu oficina pudiese tener desechos peligrosos o contaminantes, pues muchas personas desconocen el riesgo de las luces fluorescentes en caso de que se rompan.
Es cierto que es un tipo de iluminación bastante amigable con el medio y el bolsillo, al menos por el hecho de que no consume tanto como las bombillas normales.
Sin embargo, los tubos fluorescentes son muy contaminantes en caso de que se golpeen y rompan. Se trata de un gran peligro tanto para la salud como para el ambiente, pero por suerte existen maneras de evitar estos riesgos.
¿Por qué los tubos fluorescentes son residuos peligrosos?
Hace pocas décadas se desconocía el peligro del mercurio para la salud, como el que se puede encontrar en los termómetros de antes.
También los tubos fluorescentes contienen este metal, en concreto puede haber hasta 20-25 miligramos de mercurio por lámpara fluorescente. Si se rompe por accidente, el tubo desprende un gas de mercurio que es peligroso para la salud.
Envenenarse por mercurio puede producir náuseas, vómitos, dificultad para respirar e incluso problemas serios a largo plazo. Es importante ser conscientes para poder manejar este producto cuando la lámpara deje de funcionar.
Cómo manejar los tubos fluorescentes:
Muchas oficinas o comercios tienen desechos industriales como por ejemplo tubos fluorescentes, y en los hogares solemos encontrar este tipo de luminaria en las cocinas.
Si en tu oficina o en tu vivienda familiar cuentas con iluminaria de este tipo, aquí te contamos lo que puedes hacer para ser más Eco-Amigable y evitar los riesgo de las luces fluorescentes:
1. Deposita las lámparas fluorescentes en el lugar pertinente
Existen contenedores especiales o empresas como Incinerox que se encargan de la gestión de este tipo de residuos contaminantes. Encuentra una forma de dar salida a tus tubos fluorescentes y ganarás mucha tranquilidad.
2. Ventila la oficina o habitación en caso de accidente
No sucede mucho, y debes intentar evitarlo a toda costa, pero puede ocurrir un accidente: si se parte un tubo fluorescente en tu oficina o casa, debes ventilar inmediatamente la estancia para que el vapor se libere cuanto antes y se reduzca el riesgo para la salud. En este caso será tarde para proteger el ambiente.
3. Utiliza un envase para manejar estos residuos
Si colocas la luz fluorescente dentro de otro envase, como una bolsa o una caja, reducirás el riesgo de que el vapor contamine o perjudique la salud, pues el vapor de mercurio no podrá esparcirse de la misma forma.
¿Hay alguna alternativa a las luces fluorescentes?
Si existe una iluminación eco-friendly, serían las bombillas LED. Son de bajo consumo como los tubos fluorescentes, pero les aventajan en que no contaminan tanto, y además pueden ofrecer una sensación más cálida en el ambiente.
Sin embargo, no existe la opción perfecta, pues al parecer los expertos señalan que las luces LED pueden dañar la vista. Por tanto, no encontraremos la opción perfecta e intachable, pero podemos procurar optimizar los recursos que tenemos en la medida de lo posible, para reducir el impacto ambiental.
¿No sabes cómo manejar y evitar los riesgo de las luces fluorescentes de tu oficina o quieres que gestionemos algún otro residuo contaminante de tu actividad profesional? Pide aquí tu presupuesto sin compromiso.